UN FUNCIONARIO “PELOfuncional”- Por EL REPORTERO KAMIKAZE

Generador de “nuevas ideas” que le permitan exprimir al máximo el  cargo de que se trate con el que  lo haya “premiado” el patrón partidario de turno; “emprendedor” como pocos dentro de la famiglia Bartolera y destacado entre los mejores a la hora de moverse en las sombras del gobierno municipal de la actual “ingestión”.

Entre los  “cuentos del tío”, tiene en su haber la “Expo Feria Agrícola ganadera y etc.”, que significó cuantiosos gastos para nuestro pueblo (vía gestión 2000 y pico) para bancar un caprichito más del inefable Nestito. La “genialidad” del proyecto permitió que nuestra ciudad cuente con un ex “anfiteatro natural”, tal la definición del funcionario, para lo que se necesitó trasladar decenas de camionadas de tierra. Hoy día el montículo resultante permite despuntar el vicio a algunos amantes del motocross.

 

Lo que hace grande a este Bartolero de alma (o de agradecimiento) no es su capacidad “inventiva” (no se le cae una idea); sino su gran capacidad de “observador”. Siempre ha mirado, nunca trabajado, para eso siempre tiene a mano algún trabajador que explotar. Ha mirado y mirado cómo un “campito” de 400 has. no rindiera; que la producción de chinchillas no fuera más allá de un saco mustio, que  la manzanilla resultara un amargo té y los hornos de barro torta negra quemada. No ha dejado de mirar cómo un imponente equipo de maquinaria agrícola termine sin ser remunerativo y la planta cerealera tampoco alcance la productividad acorde con los tiempos sojeros que corren.

En fin, para no aburrir, dejaremos de lado otros pequeños “emprendimientos”, que los más allegados al inefable “Pelo” señalan como “muy creativas propuestas”(¿?)

Hay quienes afirman que en realidad al funcionario municipal en cuestión, “nadie lo entiende”.

La última gran “incomprensión” que no le pudo dar los dividendos que tal “intelecto” merece, fue su “copia de plantación de arándanos”. Producción que en otros emprendimientos locales fue redituable pero que a Pelinesti le resultó frustrante, más allá de que se las “ingenió” (siempre el ingenio presente) para negrear todo lo que fuera posible. Pero bueno, vio como es esto Patrona, por “el crecimiento y la causa” todo está permitido.

En tanto los cholulos del “poder” se babeaban con la mega muestra de pollos, chanchos y conejos saltarines, entre otras especies, el titular del área de “Producción” hacía una inversión de 50000 dólares por ha. en otros terrenitos familiares a los que, hasta entonces, nadie le había dado la utilidad que se merecían.

Así es que, promediando el 2004 comenzó la actividad para preparar el suelo con gran movimiento  de equipo y personal municipal, bancado por el conjunto del pueblo para sustentar otro caprichito del susodicho. Claro, pero este no era flema de pavo. Llegaban unas 7 000 plantas de arándanos de alta calidad certificadas y patentadas en yanquilandia a su nuevo emprendimiento que, ¡oh paradoja!, bautizó “El Derviche” (*).

Desconocemos si el propio funcionario fue adjudicatario de algún subsidio de su propia secretaría. Pero el caso es que lo que necesitó lo compró. Mallas antigranizo y corta viento, sistema de riego con bombas sumergibles, sistema antihelada y por supuesto las mejores variedades de plantas: Millennia, Star, Emerald y O´Neal. Todo tipo de agrotóxicos y fertilizantes, además de la aplicación de un buen sustrato al suelo y otros detalles que los legos no entenderíamos.

La cosecha de este fruto que hace las delicias de Obama y sus secuaces dura aproximadamente dos meses. En el 2006, “El Derviche” levantó 4 500 kilos, con veinticinco empleadas de riguroso negro; recolección 2007 rindió 6 500 kilos y las ennegrecidos aumentaron a cincuenta. Por último, en 2008 alcanzó el pico de los 10 000 kilos, con aproximadamente setenta y dos empleadas en negro, que cobraron entre 2 y 2,50 pesos por kilo. Cabe acotar que el negrero vendía la producción a un precio que variaba entre 5 y 7 dólares.

OTROS PELIDATOS.

En “El Derviche” hubo empleados de planta permanente de la municipalidad dando una “manito” al proyecto arandanero de don Pelito en sus comienzos, según comentan personas con amplios conocimientos del tema. Pero también hubo una empleada permanente, que trabajó día y noche entre heladas durante el crudo invierno y sofocante calor en verano. Cabe acotar que las podas que se realizaban en enero y junio, la cosecha y cualquier otro laburo dentro de la plantación se hizo siempre de riguroso negro. Claro, se había hecho un “esfuerzo económico” muy grande y los trabajadores (¿esclavos?) no podían pretender obtener más de lo que el inefable Pelo estaba dispuesto a “dar”. Igual, como ha pasado siempre con este “incomprendido” personaje, parece que los números tampoco le dieron esta vez.

¿Será que todo lo que empieza termina mal?. ¿O sólo termina mal para quienes ponen el lomo para que él facture?. ¡HUMMMM!

En fin, de todas maneras emprende un viaje, según cuentan de “reconciliación”, al gran país de los arándanos y genocidas internacionales, al gran imperio que tanto alaba.

Como sea, hacia el 2009, sin la empleada permanente multifunción, en la cosecha solo participaron cuatro empleadas de riguroso negro que pidieron $3 por kilo; Pelito ofreció apenas 2 y le plantaron la cosecha (esta vez no garcó a muchas).

De esta manera, sin pena ni gloria, terminó yéndose por el caño un nuevo emprendimiento de quien sigue siendo funcionario Bartolero y, crease o no, “Secretario de la Producción” (o algo así).

De todas maneras, es dable resaltar que a pesar de los tropiezos de sus emprendimientos, siempre con plata ajena, la función pública le ha permitido realizar EL SUEÑO DE LA MINI MANSIÓN JOLIGUDESCA, si bien hay quienes afirman que la construcción denota un cierto aire a mausoleo. TAL VEZ SEA PORQUE MORAN IDEOLOGÍAS VIEJAS Y CONCIENCIAS MOMIFICADAS.